En el ser humano, se reconocen diferentes períodos durante el desarrollo: embrio-fetal, neonatal, infanto-prepuberal, puberal, adultez y senescencia. En el testículo se distinguen dos compartimientos: los túbulos seminíferos y el intersticio. En los primeros se encuentran las células germinales –que formarán los espermatozoides en el adulto– y las células de Sertoli –con capacidad de soporte de las células germinales pero también de secreción hormonal. En el tejido intersticial se encuentran las células de Leydig –fuente principal de andrógenos en el varón. Los órganos del aparato reproductor se forman y diferencian durante la primera mitad de la vida fetal, luego el eje hipotálamo-hipófiso-gonadal persiste activo hasta pocos meses después del nacimiento para entrar en un período de reposo que afecta a la mayoría de sus componentes –si bien no a las células de Sertoli– hasta el inicio de la pubertad, período durante el cual sus componentes maduran funcionalmente determinando la adquisición de la capacidad fértil.

En el niño, los túbulos seminíferos están compuestos esencialmente de células de Sertoli que proliferan activamente y secretan hormona anti-Mülleriana (AMH). Muchas disfunciones gonadales que se evidencian en el adulto son consecuencia de anomalías del desarrollo de las células de Sertoli que se establecen tempranamente durante el desarrollo testicular. Nuestro grupo estudia esencialmente la secreción hormonal de las células de Sertoli como indicador de la función del testículo infantil y puberal. Creemos que la comprensión de los mecanismos que regulan la función de la célula de Sertoli infantil y puberal es de gran utilidad para poder realizar un enfoque etiopatogénico en los casos de hipogonadismo en la niñez y la adolescencia.

Por otro lado, los folículos ováricos también producen AMH. Los niveles de AMH circulantes en sangre son un reflejo de la reserva de folículos que tiene el ovario.

 

Nuestras principales líneas de trabajo de investigación están abocadas al estudio de:

  • El efecto de los andrógenos y estrógenos sobre la actividad funcional de las células de Sertoli: con el objetivo de determinar si los esteroides y los disruptores endocrinos con actividad estrogénica intervienen en la regulación de la producción de AMH en la célula de Sertoli en circunstancias normales y patológicas, tratando de identificar los mecanismos moleculares involucrados.
  • La relevancia de las variantes glicosiladas de la FSH en la función de las células de Sertoli, con el objetivo de evaluar el efecto del grado de sialización y complejidad de los oligosacáridos presentes en la FSH sobre la regulación de la función de la célula de Sertoli en diferentes etapas del desarrollo, caracterizando los mecanismos de señalización involucrados.
  • La identificación precoz de niños con hipogonadismo hipogonadotrófico, con el objetivo de predecir, usando los niveles de AMH, si el desarrollo puberal ocurrirá espontáneamente (retraso puberal simple) o no (hipogonadismo hipogonadotrófico congénito) en niños que consultan por retraso puberal.
  • La evaluación de la función del testículo en niños y adolescentes sometidos a tratamientos oncológicos, con el objetivo de identificar los tratamientos que afectan a las células de Sertoli y ver si dicho efecto es persistente o reversible.
  • Los mecanismos que regulan la producción de AMH en el folículo ovárico, en colaboración con el laboratorio francés que descubrió la AMH.

 

Por otra parte, nuestro grupo de trabajo es centro de referencia para AMH, habiendo desarrollado servicios tecnológicos que brinda a la comunidad:

Dosaje de AMH en fluidos corporales: para el estudio de los niveles hormonales de AMH en sangre, semen, líquido folicular, etc., con el objetivo de realizar diagnóstico y el seguimiento en el tratamiento en pacientes pediátricos y adultos:

  • Varones con hipogonadismos primarios (disgenesias testiculares, síndrome de Klinefelter, criptorquidia, testículos evanescentes, anorquia, quimioterapia, etc.) o secundarios (hipogonadismo hipogonadotrófico), genitales ambiguos (anomalías del desarrollo sexual), pubertad precoz o retrasada, otras patologías testiculares.
  • Mujeres con falla ovárica primaria (disgenesias ováricas, síndrome de Turner, quimioterapia, otras causas de falla ovárica que causan infertilidad), ovarios poliquísticos o tumores ováricos (tumores de células de la granulosa, etc.).